Podemos, los enterradores del 15M

 
Nuevos reclutas para los de arriba.

Antes de comenzar a leer esta entrada debes saber que cuando me refiero a Podemos de forma generalizada, siempre lo hago pensando en la cúpula, nunca en las bases que son mis iguales.
 
Todo lo que significó el 15M, ha sido prostituído, destruído o despreciado por los políticos. Un movimiento espontáneo, en el que se salía a la calle a título personal, sin ninguna banderita de este o aquél partido (al menos en los comienzos) y sin ninguna bandera estatal, republicana o monárquica, trapos de colores ambas. Por unos meses tuvimos la sensación de poder cambiar este sistema podrido y que sobrevive a base de chantajes, sobornos, amenazas o directamente la agresión y la prisión. No es que se pensase en cambiarlo todo de la noche a la mañana, cosa harto difícil, pero sí se tenía la convicción de que esto podría ser el principio de algo mucho más grande; la concienciación política de todxs nosotrxs, el poder proponer y rebatir a la vez que se es escuchadx y respetadx.
 
Un movimiento asambleario en el que la opinión de todxs debe contar, sin líderes, sin mejor preparados de esos, puesto que decir a unos mejores es despreciar la inteligencia de otros; ya que la cosa no va de ver quien es el más listo de la clase, sino que con la opinión de todxs se llegue a un consenso en el que todxs salgan beneficiadxs, en el que con el trabajo de todxs logramos el bienestar general, sin despreciar a nadie, porque cualquier persona es igual de digna, ya sea doctor en física nuclear o un desatascador de alcantarillas, todxs tenemos el mismo derecho a vivir, a opinar y a ser escuchadxs, a decidir vaya.
 
 
Entonces surgieron los oportunistas, Podemos, o mejor dicho; Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero e Íñigo Errejón, y algunx más pero de menor entidad. Ellos, sabiamente, porque así es, consiguieron infiltrar a los suyos dentro de las asambleas vecinales para transformarlas en Círculos, consiguieron hacer creer que cuatro politólogos saben mejor que todo un barrio qué es lo mejor para todxs, aunque por muy inteligentes que sean (cosa que no dudo) tres o cuatro cabezas nunca podrán pensar mejor que miles o millones, es cuestión de sumar, y la de Podemos de restar, de no escuchar porque se tiene la clave de todo y tú o yo nada sabemos de la vida, puesto que no ostentamos títulos universitarios patentados por el Estado. Al parecer estamos pésimamente preparados para poder discutir entre iguales cual es la mejor manera de convivir, sin depender de la exclusiva opinión de académicos marxistas que ridículamente se autodenominan científicos sociales y que pretenden poder cuadricular la vida, cuando todo lo creado por la sabia naturaleza es fruto del azar que ha llevado al preciso y exacto orden natural. Querer cambiar eso es como pretender meter un palo entre los radios de una bicicleta en movimiento para así frenar lentamente.
 
Al fin tenemos el programa electoral de este partido que dice no ser tal, aunque tengan secretario general. Comencemos con la presentación, ya de entrada graznan que este es un programa <<inteligente>>, ya que si intentaran venderlo como un programa para memos nadie lo compraría, evidentemente. <<Somos distintos, pensamos distinto, actuamos de forma distinta>> Ser distinto no convierte a nadie en nada, simplemente se es distinto a otros, claro que los políticos siempre hablan de manera que después se puedan interpretar sus palabras según convenga a la estrategia del partido. <<Tenemos mucha riqueza mal distribuida por problemas de diseño>>. La pobreza, la represión, la falta de libertad; todo es solamente un problema de diseño, me imagino que en esto Victorio y Luccino (nuestras diseñadoras más internacionales) asesorarán a Pablo en aras del bien común.
 
 
Estos de Podemos dicen querer asaltar el cielo, aunque San Pedro no se lo pondrá nada fácil, se necesitará un largo asedio antes de superar las murallas, a no ser que el llamado asalto solamente consista en llamar a la puerta y pedir permiso para sentarse en la mesa de los de arriba, esgrimiendo para ello las voces lejanas que se escuchan allá abajo, el amenazador ariete que quedará abandonado a su suerte una vez cumplida su misión.
 
Soviet significa en español asamblea. Al igual que los bolcheviques (salvando las distancias, por supuesto), que antes de la revolución eran una minoría con poco apoyo popular, han infiltrado en las todas las asambleas posibles a sus gentes, para de esta manera, sibilinamente, antes de mostrar sus verdaderas intenciones, la de formar otro partido político más que nada tiene que ver con el asamblearismo, ir inyectado el veneno de la delegación en los "mejor preparados". Una vez creado el nuevo partido y negando al principio que se es tal, comienzan a repartirse los carguitos, evidentemente, esos puestos serán copados por aquellos que mejor oratoria y poder de convicción tuvieron dentro de las asambleas. Entonces, una vez consolidado el nuevo partido político, se comienza a ordenar y a dejar de escuchar. Uno de los ejemplos más tristes de ello es Ada Colau; triste porque, ingenuo de mí, llegué a creer que Ada no se prestaría al mamoneo político como finalmente así ha sido.
 
Mi encono con Podemos, poco tiene que ver con los motivos que esgrimen los fachas, como podrás imaginar. Para empezar, lo que más asco me da de ellos es la cantidad de posibles abstenciones que están robando, justo en el momento que más se necesitan. Los fachas seguro que no se quejan de ellos por eso, muy al contrario, siempre preferirán que se vote, sea a quien sea, a que la población se abstenga y les quite realmente la legitimidad. Mientras se vote, todo queda legitimado para quienes viven de ti con tu consentimiento, con tu voto. Por otra parte, siempre me han asqueado los prepotentes henchidos de vanidad, quienes engañan para así demostrar que se tiene la razón o aquellos que justifican cualquier medio para alcanzar un fin.
 
Con respecto al programa de Podemos, no encontramos por ninguna parte alusión alguna hacia lxs presxs políticxs del PP. Sindicalistas, manifestantes y anarquistas, éstxs últimxs encerradxs simplemente por lo que piensan. Mientras tanto, no paran de graznar acerca del 15M, el cual consistió en retar a la legalidad criminal existente, cosa que impeninablemente conlleva riesgo de represión, ya sea en forma de palos o de prisión. Parece que una vez conquistados los despachos, dar la cara por aquellos que más la dieron en el 15M y posteriormente, cosa que los ha llevado a prisión o a recibir cuantiosas multas que les joderán la vida para siempre, podría restar votos de la clase media, de los "moderados", de los asépticos políticos, como yo les llamo, puesto que lo único que les importa es que les garanticen lo suyo, y son felices aunque la miseria campe a sus alrededores y tengan que protegerse con alarmas de última generación del odio que va concentrándose alrededor de sus bonitos chaléts.
 
En este programa tampoco se hace referencia alguna (o se pasa de puntillas sobre ellas) a la creación de cooperativas de trabajadores, expropiación de tierras a los terratenientes o la prohibición de enseñar a la Iglesia, por no hablar de los Borbones, veamos lo que literalmente dice el programa con respecto al empleo rural, donde más paro existe.
 
<<Fomento del empleo rural mediante programas gestionados desde las comunidades autónomas y los municipios, en colaboración con cooperativas y empresas>>
 
Traduzcamos estas palabras académicas escritas para que pocos las entiendan en toda su amplitud. ¿Por qué no se dice claramente que las cooperativas deben recibir préstamos a interés 0 hasta haberse afianzado?, ¿por qué no dicen que los productos producidos en esas cooperativas deben tener preferencia sobre los importados?, si consumimos pimientos del piquillo del Perú y espárragos de China, ¿qué ostias producimos nosotros entonces? Yo tengo una máxima, en política, todo lo que no es meridianamente claro hasta para el más lerdo, esconde una mentira. Para empezar, esta es la única referencia sobre las cooperativas de trabajadores que he podido encontrar en todo el programa. Este es un tema crucial para poder conseguir el pleno empleo y la emancipación del capital, que los trabajadores se organicen para ser ellos mismos sus propios jefes, lo que viene siendo poner en manos de los productores los medios de producción, nada baladí como ya sabéis. Pero en el programa se ponen en igualdad de condiciones cooperativas y empresas, pretenden engañar un poco poniendo en primer lugar a las cooperativas, pero de ninguna de las maneras las sitúan preferentemente por encima de las empresas privadas, con lo que esto huele a simple maniobra para poder contestar cuando se les pregunte al respecto. La impostura es aún más descarada cuando supuestos marxistas dedican más espacio en su programa a fomentar las PYMES que hacerlo en beneficio de la creación de empresas de trabajadores. Puede ser que quienes mandan de verdad no les permiten pasarse demasiado de la raya y ellos lo acatan porque es condición indispensable ser "políticamente correcto" si se aspira a mandar sobre los demás.
 
Es un programa frío, lleno de promesas y palabras grandilocuentes, el programa de un partido político, no de un movimiento social (como ellos se hacen llamar) que viene para cambiar todo lo podrido del sistema, estos no van a cambiar nada, se adaptarán a lo que más votos sume sin importar nada más que llegar al Poder y una vez llegado (cosa bastante improbable a pesar de sus estudiados engaños) todos sus esfuerzos se centrarán en conservar dicho Poder. Así ha ocurrido siempre desde que existen políticos partidistas, no es cuestión de opinión, sino de Historia de la Humanidad. Han servido de fontaneros del Estado, taponando las podridas cañerías por donde se escapaban adeptos al régimen pasando a las filas de la abstención. Ellos son los mayores culpables de que no se haya roto con todo lo conocido hasta ahora, de que se siga votando y delegando. Han vaciado las calles y envenenado las asambleas con los liderazgos, han transformado la rabia consciente en inconsciente delegación, legitiman el sistema que dicen repudiar, la estrategia ha suplido a la conciencia.
 

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