Mario Jiménez, el monigote de la Gusana que roe al PSOE


Todo un líder obrero oigan.

Ahora que los sociatas van a permitir que el PP siga gobernando, no está de más conocer un poco mejor a las nuevas caras impuestas por quienes subvencionan al partido. Los casos de Gusana Díaz y su lacayo Mario Jiménez, los más beneficiados por el nuevo cambiazo sociata, hablan por sí solos. Toda una vida al servicio del partido, sirviendo para servirse. Empecemos por Mario Jiménez, el cual puede resultar extraño más allá de Despeñaperros, pero para los andaluces que seguimos la política este monigote con cara de memo es alguien bastante conocido y detestado por su insulsez cerebral, así como por su carencia absoluta de ética en cuanto a blanquear los ERES. Veamos:

Con 23 años ya era Secretario general de las Juventudes Socialistas de Huelva 1994-95. Poco después, de los 24 a los 28 años, consiguió trepar hasta Concejal en el Ayuntamiento de Moguer (95-99), ya apuntaba maneras. Con 29 años ascendió un peldaño más dentro de la familia sociata, Parlamentario andaluz por Huelva (desde el año 2000) 

También ha sido vicepresidente de CajaSol, Asesor en el Gabinete de Relaciones Institucionales de la Presidencia de la Junta de Andalucía en el año 1997, Subdirector General del Instituto Andaluz de la Juventud de la Consejería de la Presidencia, Secretario de Solidaridad y Cooperación de la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE-A. 

Ahora se encuentra pletórico, en la cima de su trepada, puesto que este personajillo insignificante no puede aspirar a más. Todos estos años lamiendo culos, explicando los desmanes de su propio partido con el dinero de trabajadores, jubilados y parados, esperando agazapado su momento; toda esa sumisa lealtad está siendo premiada, y él incluso muestra más convencimiento de hacer lo correcto que los amos a los que sirve. Este tipo de gentuza no es que sean de izquierdas, derechas o centro, carecen de cualquier tipo de ideología o convencimiento ético, para este tipo de arrastrada sabandija lo correcto es lo que a él más convenga y point.

En la foto, Mario Jiménez (derecha), en el palco de invitados del Congreso, junto al presidente del Senado, Pío García Escudero. Cerdos que gruñen en el mismo tono.

Aquí podéis leer algunas de las perlas graznadas por este mequetrefe:

“Si el Comité Federal opta por la abstención, todos acatarán, incluido Sánchez”. 

“Cada diputado viene de ser elegido en nombre y representación de una lista, del PSOE y no se plantea ni se planteará que los diputados del PSOE no hagan otra cosa que apoyar la posición política que determinen los órganos del partido”.

“No hay que tener miedo a ningún debate ni a ninguna palabra, –en referencia al término abstención–. Si el Comité Federal, que es el competente para fijar la posición de cara a la conformación del gobierno, opta por dicha abstención, será ésa la posición que ejecute el Comité Federal del partido, y si opta por otra, pues otra”

Parece lógico que para este pazguato que intenta parecer inteligente, eso de la disciplina de voto sea la opción con más sentido común. Su miserable conveniencia, así como su falta de inteligencia, le impide ver que esa disciplina de partido es cercenar la inteligencia para hacer de los dirigentes seres sin opinión propia más allá que la de los gurús de su secta dicten. Deja claro que todos deben ser como él, obedientes monigotes que solamente son un nombre en una lista patrocinada por el PSOE y por lo tanto deben obediencia ciega a sus padrinos.

"Cuando haya un pronunciamiento del comité federal, esa será la posición del PSOE; cuando legítimamente se conforma una voluntad, se acepta por todo el mundo. Esa es la esencia de la democracia".

Hay que ser imbécil y malintencionado. Dice que la esencia de la democracia es la obediencia debida y sin fisuras. Esa es la esencia de la mafiocracia, en la cual se unta a los de arriba y estos dictan a los subalternos y militantes como deben pensar. Es muy difícil comprar todo un partido, pero si se paga bien a los que mandan y estos exigen disciplina de partido a los que se encuentran jerárquicamente más abajo, pues ya tenemos la base de la Cosa Nuestra.

1 comentario:

Loam dijo...

Ni obrero ni socialista, otro monaguillo de los muchos que le chupan la verga a los clérigos del capital.

Salud